(CNN) — La decisión del presidente de EE.UU. Joe Biden de indultar a su hijo ha dejado a algunos demócratas furiosos por su elección tras afirmar repetida e inequívocamente que nunca daría ese paso, a pesar de que un indulto parecía posible desde hace tiempo para el equipo legal de Hunter Biden.
Varios funcionarios que trabajaron recientemente para Joe Biden dijeron que nunca creyeron al presidente ni a los asesores de la Casa Blanca que hablaban en su nombre cuando insistieron en los últimos meses que un indulto para Hunter Biden estaba descartado.
«Cualquiera que estuviera cerca de lo más alto sabía que probablemente iba a hacer esto. ¿Por qué pretendimos lo contrario?», dijo un exasesor senior del Ala Oeste.
Un exfuncionario senior diferente de la Casa Blanca dijo que ellos y otros a su alrededor se sentían «seguros» de que el presidente finalmente indultaría a su hijo, mientras que otro exfuncionario de la administración lo expresó de esta manera: «Era demasiado, dolorosamente obvio que esto era donde terminarían las cosas».
El presidente Joe Biden y su hijo Hunter Biden caminan en el centro de Nantucket, Massachusetts, el 29 de noviembre de 2024. Crédito: Jose Luis Magana/AP
Sin embargo, incluso cuando algunos de los aliados más cercanos de Joe Biden estaban desconcertados por el indulto de última hora del presidente, Hunter Biden y sus abogados creyeron durante mucho tiempo que era posible, dijeron múltiples fuentes a CNN. Eso a pesar de que la Casa Blanca dijo que una decisión final sobre el indulto se tomó solo este fin de semana.
La medida del presidente el domingo por la noche para anunciar el indulto se produjo después de pasar tiempo con su familia, incluido Hunter, en Nantucket, Massachusetts, durante el feriado de Acción de Gracias y ha llevado a legisladores del propio partido de Biden a criticarlo. La secretaria de prensa Karine Jean-Pierre dijo recientemente, el 7 de noviembre, que no se consideraba un indulto para Hunter Biden.
La decisión de Joe Biden de indultar a su hijo presentó un delicado acto de equilibrio para el presidente, quien ha sido durante mucho tiempo ferozmente leal a su familia, incluso cuando eso va en detrimento personal o político.
Hunter Biden fue condenado por un jurado en junio por comprar y poseer ilegalmente un arma como usuario de drogas, después de un juicio desgarrador que profundizó en su abuso de drogas y disfunción familiar. Luego se declaró culpable en septiembre de nueve delitos fiscales, derivados de US$ 1,4 millones en impuestos que no pagó mientras gastaba lujosamente en escorts, strippers, autos y drogas.
Fuentes familiarizadas con la estrategia legal de Hunter Biden dijeron que no habría aceptado declararse culpable en septiembre de los nueve cargos en el caso fiscal federal — exponiéndose a la posibilidad de 17 años de prisión y más de US$ 1 millón en multas— sin la expectativa de clemencia.
La presión legal sobre Hunter Biden aumentó a medida que se acercaban sus fechas de sentencia en diciembre. Personas cercanas al hijo del presidente dijeron que no querían que tuviera que someterse a la sentencia.
En los días previos a la emisión del indulto, los abogados de Hunter Biden circularon un documento de 50 páginas que describía la investigación de seis años sobre el hijo del presidente y culpaban a Donald Trump y a sus aliados republicanos de ser la fuerza impulsora detrás de sus problemas legales.
Aunque controvertido, el movimiento de Joe Biden de indultar a un miembro cercano de la familia o asociado no es inaudito. Presidentes de ambos partidos han ejercido su poder de indulto de maneras que han levantado cejas, aunque quizás ninguno lo hizo después de decir tan firmemente que no lo haría, como lo hizo Biden.
Trump indultó a Charles Kushner, el suegro de su hija, en su último mes en el cargo. El presidente Bill Clinton indultó a su medio hermano Roger, quien se había declarado culpable de un cargo de drogas, en su último día en el cargo.
La reversión pública de Biden este fin de semana y la emisión de un indulto «completo e incondicional» para su hijo ha dejado a algunos demócratas preguntándose por qué había mantenido que no tomaría un curso de acción que parecía simplemente inevitable para tantos alrededor del presidente.
«Como padre, lo entiendo», dijo el representante Greg Landsman, un demócrata de Ohio, en X. «Pero como alguien que quiere que la gente vuelva a creer en el servicio público, es un revés».
Otro demócrata, el senador Michael Bennet de Colorado, dijo que la decisión de Biden colocó «el interés personal por delante del deber y erosiona aún más la fe de los estadounidenses en que el sistema de justicia es justo e igual para todos».
El representante demócrata Greg Stanton de Arizona dijo que, aunque respeta al presidente, «creo que se equivocó en este caso».
«Esto no fue una acusación motivada políticamente», dijo Stanton en X. «Hunter cometió delitos graves y fue condenado por un jurado de sus pares».
Un exfuncionario del Gobierno sugirió que la reacción del lunes habría sido menos intensa si Biden no hubiera sido tan firme durante meses en que no buscaba un indulto para su hijo.
«Me pregunto si había una manera de ser menos recto al respecto, y más como: ‘No estamos dedicando nuestro tiempo a pensar en eso'», dijo el exfuncionario del Gobierno.
El exasesor senior del Ala Oeste repitió esa idea, al decir que había múltiples maneras en que Biden podría haber dejado la puerta abierta a un indulto en lugar de descartar su posibilidad por completo.
«¿Podría haber sido súper honesto?», preguntaron. «Como, ‘Oye, no lo sé, no puedo responder eso ahora mismo'».
Jean-Pierre, quien en más de una ocasión dijo a los periodistas que Biden no indultaría a su hijo, admitió este lunes que la victoria de Trump en las elecciones del mes pasado había sido un factor.
«Es un no, puedo responder eso, es un no», dijo Jean-Pierre a los periodistas en el Air Force One, cuando se le preguntó si Biden habría indultado a su hijo si la vicepresidenta Kamala Harris hubiera ganado las elecciones.
Pero luego procedió a insistir en que no estaba interesada en discutir un evento que no ocurrió: «Puedo hablar de dónde estamos hoy, y por lo tanto no puedo hablar de hipótesis aquí. Donde estamos hoy, el presidente tomó esta decisión durante el fin de semana».
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