REDACCIÓN- La muerte de la cantante tailandesa Chayada Prao-hom, de 20 años, generó conmoción y puso en el centro del debate las técnicas de masaje empleadas en centros turísticos.
Los médicos confirmaron que la causa de su muerte fue una infección sanguínea y una inflamación cerebral, aunque aún no está claro si estas complicaciones están directamente relacionadas con los masajes.
Las autoridades locales inspeccionaron el salón tras su muerte y descubrieron que sólo dos de las siete masajistas tenían licencias legales válidas, mientras que las demás están bajo investigación.
Especialistas alertaron sobre los riesgos de manipulaciones cervicales mal ejecutadas, conocidas como “torsiones de cuello”, que pueden provocar lesiones graves o incluso la muerte.
Los expertos en kinesiología y traumatología advirtieron sobre los riesgos del masaje tailandés mal realizado, especialmente en sitios turísticos. Subrayaron la importancia de que estas prácticas sean llevadas a cabo por personal capacitado y que se evalúen las condiciones de salud previas del paciente, ya que podrían provocar lesiones graves o incluso la muerte, particularmente en personas con problemas de coagulación o hipertensión.
Chayada Prao-hom, cantante de música folk, buscó aliviar un dolor de hombro mediante masajes en un salón de la ciudad de Udon Thani. La joven, que tenía conocimientos básicos sobre masaje tailandés debido a que su madre era masajista, no sospechó que estas sesiones pudieran ser peligrosas.